Participantes Domesticidad y desafio (2014)

Escritos por participantes del taller Domesticidad y Desafio (2014)

Olga Rubi

Primera Sesión:

Puede darme ansiedad pensar en qué significa para mi cuerpo levantarse del piso moviendo una sola parte de el. Sin embargo me gusta la idea de analizarlo, trabajarlo. Por ahora, sólo iré levantándome lentamente mientras trato de estar presente dentro de mi... en esquinas y lugares que no conozco bien. Respiraciones maestras...

Abstracción o sustracción? (calentamiento improvisado)

Para Jaime: El trompo giró. El hilo lo enrolló: extrañeza de la luz que agarra y reconoce. Es redondo y le place; agridulce. El ahoga, lo ahoga...un gancho de ropa para sacar las llaves atrapada. Las venas verdes en la frente roja tienen un peso y manipulan sutilezas. Arriba, abajo, el viento tiene eco que le rosa los tentáculos. Quise soñar un poco en ese grito que me penetró y queda pintado sin pestañas al salir del túnel. Mirar atrás y adentro siempre envenena la gravedad.


Para Valeria: Marullo en el azúcar que no alcanza en el gabinete más alto. La aguja del reloj la envuelve. Pela los colores como se pela la papa; está en el talco de bebé. Se empuja lo que se quiere. Los gusanos salen a cantar. (Ombligos huecos sin sentido). Asfalto transmutado a sol y el agua, el agua fresca duerme en sus pies.
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~ Amo jugar ~ ¿Por qué no hacer de todo un juego? Volver a la ingenuidad y la inocencia para crear o existir en algunos espacios es una aspiración cotidiana que suele convertirseme en reto. Tal vez es una reflexión para otro día no tan pertinente al ahora.

Jabón: Rueda, cae, me muevo hacia el de cualquier forma, intento levantarlo del piso con cualquier parte que no sean las manos y treparlo a otra parte del cuerpo.

Escoba: Creo imágenes. Logro bailar con ella y exploro la arquitectura del espacio mediante su largo. Es prótesis. Mas imágenes...no encuentro el juego aun porque de momento no lo quiero pensar.

~ Reflexiono sobre algo que dijo Marili: cómo una limitación dentro de las reglas del juego puede hacerlo más juego y menos ritual.



Jaime Maldonado

Día 1

Calentamiento - ejercicio de dialogo, conciencia del cuerpo en movimiento. El estar consciente de mover una parte del cuerpo a la vez hasta ponerse de pie es complicado un poco incomodo quizás en ocasiones. Es un trabajo de inventario de nuestro cuerpo, de pensar en cada parte como si fuera individual y de crear nuevas posibilidades en el movimiento.

Mire a Valeria

Parir, juego, juego con placenta.
 Esta sobre el suelo sucio, roto, desnudo,
sigue sucio, sensual, adentro y afuera
 en camino en regreso.

Mire a Olga

Placer, odio, placer y dolor,
voz dialogo, edificio es arquitectura.

Día 2

El dialogo con el ambiente esta muy vivo, mas cuando es un  espacio domestico. Lo intimo y privado de Marili deja de serlo para convertirse en un espacio de dialogo con nosotros tres,la casa sola es ya un impulso para el movimiento.

Ejercicio, movimiento con la arquitectura del espacio. Fui a la cama donde se descansa donde tenemos sexo (tradicionalmente). El estado de inmovilidad al dormir y los movimientos al chichar me ponen a pensar en la cama como espacio de movimiento, tanto así que esta sobre el suelo, elevada como los escenarios en teatros tradicionales, es una imagen paralela.   Es un espacio domestico de placer, de descansar, dormir y tener sexo. El movimiento puede tomar muchas direcciones,




Valeria Sofia

Sesión #1: Domesticidad y desafío

Dislocando las funciones de los objetos

(Viendo a Jaime)

Se busca y se va encontrando, llega al lago de los misterios coloridos que lo seducen...y lo confunden. Se deja llevar y fluir por los colores y texturas, ya no sabe si es el agua o la luna lo que le provoca la pequeña muerte. Es una culebra melancólica, con alas de águila y escamas doradas.

Se sigue buscando... se encuentra en el fondo del lago.

(Viendo a Olga)

Está en la hamaca, que la incomoda, le da seguridad pero a la misma vez es reconfortante. Se convierte en un caparazón, de tortuga marina mutante, sirena en metamórfosis. Pirámide egipcia dislocada, brújala sin rumbo...vuelve a ser caparazón.

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Primeras reacciones: mucha pompiaera, contentura y comodidad de entrar en este espacio tan íntimo de una práctica artística colectiva. El explorar las acciones lúdicas a través de la dislocación de objetos domésticos me seduce mucho, con infinitas ganas de seguir explorando y creando, indagando y dislocando!

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Mis pies yacen sobre la paleta y lata de pintura luego de que fueran mi almohada y me deslizara con ellas queriendo que nos mezclemos. Hacemos muchos círculos, grandes, pequeños, me tropiezo, comienzo de nuevo. Vuelta, almohada, pies...ondas circulares como los de la paleta, donde la pintura yace.

Esto no es una pipa. Ceci n'est pas une pipe. Se vuelve la pipa un puente para la seducción. Recorro, escucho, siento...me detengo y oigo. Teléfono túnel telégrafo. Se vuelve tan entretenido el juego que no sé cual es cual. Todos y ninguno, se traslada y encarna todo.

¿Son domésticas las pinturas y la pipa? En la medida en las necesitemos para llevar a cabo actos cotidianos, que no pensamos como domésticos, solo los hacemos y ya, sin pasarlos por el filtro del pensamiento. Esta cotidianidad íntima que ejercemos desde nuestro cuarto, sala, patio, carro...desde ese útero que nos da ilusión de protección y nos sentimos a salvo...

Sesión #2: Domesticidad y desafío

Dislocar los ritmos, entrar y salir, dance 'till exhaustion!

Aunque se siente aún difícil y complicado, logro sentirme mas en sintonía y visualizar pararme usando una sola parte del cuerpo...rítimicamente. Hombro, brazo, antebrazo mano, espalda, core, cadera, muslos, pies...vertebra por vertebra. 

Regresar a improvisar con los objetos domésticos (sin los objetos) resulta un reto interesante. Aventureo en mi memoria y re-escribo, la ausencia del objeto abre posibilidades para el movimiento. Me inmerso tanto en el juego que se me olvida la memoria y el rastro del objeto. Juego, ritmo, juego, ritmo.

Hacer espirales con el cuerpo hasta el cansancio, promover movimientos y seguir por ahí pa'bajo. Más espirales y música, nuestros espirales se unen, quisiera vernos desde arriba. Pudiera estar haciendo esto por horas, 'till real exhaustion! El tiempo se vuelve más lento y no se siente.

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Exploro en el cuarto con las mesas, los cojines, caminar en el sofá, las luces y la silla. La reducción del espacio no significa necesariamente una limitación, posibilidades yacen en la dificultad. Limitaciones que tientan más ganas de explorar... ¡Espero no romper nada! Llevarlo al escenario, seducciones de la memoria y la ausencia del espacio.

Reflexiono sobre el entrar y salir (de uno mismo), explorar los cansancios, dislocar las intenciones y funciones de los movimientos y jugar con las gamas de velocidades. 

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Sesión #3: Domesticidad y desafío

Pararse con una sola parte del cuerpo sigue siendo difícil, pero ahí vamos...demasiado rápido, demasiado lento, ritmicidad, armonía.

Errores que cautivan, indagar en las pausas tranquilas.

Domesticidad misteriosa...¿que hay detrás de las puertas, de los gabinetes, de las gabetas? Buscar escape de ese llamado a esconder y guardar, dentro de nuestra cotidianidad mas íntima.

Reflexiono sobre matizar con la calma, jugar con las miradas, los ritmos no-rítmicos y buscar la salida en el cuerpo ~

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Desde mi recoveco mas íntimo, donde nacen todos mis rituales, entre humo, agua y café...